Tanto en las importaciones como en las exportaciones de productos y servicios a países que no formen parte de la Unión Europea, los autónomos y empresarios deben tener en cuenta ciertos factores fundamentales para no incurrir en problemas fiscales o legales. Para ello, es imprescindible saber todo sobre la factura extracomunitaria: qué es, cómo hacerla y sus implicaciones impositivas.
La factura extraordinaria es aquella que se emite en el comercio de mercancías o la prestación de servicios a una empresa localizada en un país que no forme parte de la Unión Europea. En estos casos, cada territorio tiene sus normativas y particularidades, por lo que conviene informarse en profundidad si se van a realizar compras o ventas extracomunitarias.
Índice de contenidos
Cómo hacer una factura extracomunitaria
En el IVA de factura a un proveedor extranjero, debemos tener presente el artículo 21.1 de la Ley 37/1992, de 28 de diciembre, en el que se expone que las entregas de bienes transportados o expedidos fuera de la de la Comunidad Europea, estarán exentas del pago de IVA.
Esta normativa es bastante simple y sencilla de interpretar para todos los profesionales de la exportación. Cuando se realice una venta de productos o servicios destinada a una compañía cuya sede no se encuentre en la Unión Europea (por ejemplo, facturar a una empresa suiza), no tendremos que incluir el IVA.
Requisitos para no tener que incluir el IVA
Visto lo anterior, debemos tener presentes dos requisitos imprescindibles para no incluir el IVA en nuestras facturas extracomunitarias:
- El producto o servicio debe tramitarse de forma física (mercancía que sale de las fronteras del país para llegar a la nación de destino) o virtual (servicios y trabajos vía digital).
- El receptor del producto o servicio tiene su sede en un país externo a la Unión Europea.
Por otro lado, también cabe destacar que, para una exportación extracomunitaria, no existe la obligación de darse de alta en el ROI (es exclusivamente para operaciones intracomunitarias). Sin embargo, debemos tener presentes otros documentos como la factura comercial, el DUA o el documento de transporte internacional si queremos exportar fuera de la UE.
Cómo debo informar de las facturas recibidas de países no comunitarios
Hasta ahora hemos tratado las importaciones extracomunitarias, pero también debemos informar sobre una importación proveniente de un territorio externo a la UE. En estos casos, pese a que el producto provenga del extranjero, tendremos que pagar el IVA en todos los casos, al considerarse una compra realizada en el territorio español.
Para realizar este proceso, tendremos que pagar todos los aranceles legales y el IVA correspondiente, y recibiremos el DUA para, posteriormente, adjuntarlo a la factura original. En el caso de la compra de servicios, estos no pasarán por aduanas, por lo que la factura del proveedor no tendrá que incluir el IVA o los aranceles.
Cómo contabilizar facturas extracomunitarias
Volviendo al plano de las exportaciones, debemos matizar un aspecto muy importante a la hora de facturarle a un cliente extracomunitario. Ya sabemos que no tendremos que incluir el IVA, pero es obligatorio especificar que el IVA se factura a un 0% en el modelo correspondiente.
Este modelo, el designado para las facturas extracomunitarias, es el 303, por lo que debemos tenerlo bien presente si el negocio se dedica a la venta de productos o servicios con clientes externos a la UE. El IVA no se incluye en este tipo de operaciones por los problemas fiscales que generaría a las empresas extranjeras, las cuales se verían en la obligación de reportar los impuestos a nuestra Agencia Tributaria.
El IVA en exportaciones e importaciones al extranjero
Para terminar de profundizar en el tema del IVA en exportaciones e importaciones a países externos a la UE, especificaremos lo que se debe realizar en los cuatro escenarios posibles:
- Las mercancías exportadas estarán exentas de IVA.
- Los servicios exportados también estarán exentos de IVA.
- Las mercancías importadas no están exentas de IVA, y su abono se realiza en aduanas.
- Los servicios importados requieren de la autoliquidación del IVA.
Qué impuestos se pagan por facturar a un extracomunitario
Como ya hemos detallado a lo largo de este artículo, facturar a un extracomunitario por la venta de productos o servicios es una operación totalmente exenta de IVA. Simplemente, tendremos que limitarnos a guardar el DUA de exportación, la factura comercial y el documento de transporte internacional para realizar la operación con toda seguridad.
Por otro lado, también cabe destacar que, en este tipo de operaciones, no es necesario añadir la retención de IRPF a una factura extracomunitaria, por lo que tampoco debes preocuparte por este inconveniente. Recuerda que todos los ingresos obtenidos por pagos de empresas extranjeras deben figurar en el modelo 130.
Cómo hacer una factura internacional
Una factura internacional no tiene complicaciones excesivas con respecto a las convencionales, exceptuando un factor determinante del que hablaremos más adelante. La estructura de toda factura internacional debe contener los siguientes elementos:
- Información básica de las dos partes.
- Fecha de emisión y numeración.
- Cantidades y mercancía de la operación.
- Precios.
- Cuotas tributarias y tipos impositivos.
- Términos de entrega, forma y condiciones de pago.
Además, una factura internacional debe incluir un elemento fundamental: la divisa en la que se realiza el pago. Esta debe decidirse en un previo acuerdo con la otra parte, y su especificación es clave para evitar pérdidas de valor en caso de que haya una fluctuación en el cambio entre ambas monedas.
Ahora que sabes cómo contabilizar una factura con IVA extranjero, no tendrás ningún problema a la hora de exportar o importar productos en países que no formen parte de la Unión Europea. Además, te recomendamos leer este artículo sobre los mejores programas de facturación para empresas que te ayudarán en la gestión diaria de tu negocio.
